Un reciente estudio de Sergio Tomé Fernández, del Departamento de Geografía de la Universidad de Oviedo, en el que se analiza, de forma comparada, el cambio de modelo productivo en Langreo, Mieres, Ponferrada y Puertollano, afirma respecto al proceso de reconversión, que hay desaciertos evidentes “como la concesión a veces indiscriminada de ayudas, sin aplicar criterios más selectivos para ahuyentar a las empresas caza subvenciones”, y a la par que pone en entredicho el papel de la administración “por no fomentar suficientemente el I+D+I”, destaca “la falta de una clase empresarial con criterios más elevados que los del neoliberalismo extremo y el mínimo esfuerzo”.
La crisis económica está derrumbando los pilares de la reconversión minera, destapando una autentica orgía privada, pagada con dinero público, y con la complicidad por acción ó por omisión del Gobierno Regional, al negarse reiteradamente a establecer algún tipo de control sobre la gestión de las empresas creadas al calor de dichas ayudas.
La aluminera, instalada en la antigua escombrera del Pozu Maria Luisa en Ciañu, con apenas seis años de actividad, recibió más de 20 millones de € en ayudas y está capitalizada en un 49% por el Principado. Se encuentra al borde de la quiebra, al presentar una deuda acumulada de más de 70 millones de €. Con ello, el futuro de sus 265 trabajadores/as es verdaderamente incierto.
Con unas instalaciones punteras, con una plantilla joven y cualificada, con recursos económicos suficientes, se debe de exigir una explicación clara y concreta al consejo de administración del por qué de está situación. Es el primer paso, para creer en un plan de viabilidad que garantice el futuro de la misma, y que no se limite como en los dos expedientes de regulación de empleo anteriores, a hacer recaer el peso del esfuerzo a unos trabajadores/as, a los que se les adeuda continuamente nóminas y agotan sus prestaciones por desempleo, mientras no se visualiza ningún tipo de compromiso por parte de los responsables de está situación.
Las diferentes administraciones deben implicarse en la búsqueda de soluciones que garanticen la continuidad de Alas Aluminium. A los empresarios piratas, se les debe de exigir responsabilidades y que devuelvan el dinero que han malgastado. Es la hora de la solidaridad con estos trabajadores y sus familias, es la hora de luchar por el empleo en la empresa y en la comarca.
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