Vamos!

El 15 de septiembre, todos/as a Madrid para defender el futuro.

Las decisiones que el Gobierno está tomando van en la dirección contraria a una salida justa de la crisis. La situación empeora por momentos, quieren acabar con todo, y vamos directos a la ruina del país, a la par que crece el enriquecimiento vergonzoso de los grandes empresarios y banqueros.

En el mes de julio, a iniciativa de CCOO y UGT, se ha impulsado una Cumbre Social con más de 150 organizaciones de todo tipo, que a través de la unidad de acción pretende impulsar un amplio proceso de movilizaciones masivo para recuperar todo lo que nos están robando. Para empezar, unas exigencias mínimas democráticas. No puede ser que el PP, con el apoyo tan solo de tres de cada diez electores, tenga mayoría absoluta en Las Cortes. Además no sólo no cumple su programa electoral sino que hace lo contrario a lo prometido: abaratamiento del despido, cargarse la negociación colectiva, eliminar la financiación de la Investigación y el Desarrollo, subir los impuestos, privatizar la educación y la sanidad, precarizar las condiciones de trabajo de los empleados públicos, intentar cerrar la minería del carbón... .

De ahí, que exijamos la convocatoria de un referéndum para conocer la opinión de la ciudadanía sobre los recortes aprobados, y si no lo hace el Gobierno, seremos nosotros quienes organicemos la consulta popular. Con el resultado del mismo, la intención es caminar hacia una gran acción general, que sostenida en el tiempo, comprometa la convocatoria de nuevas elecciones generales.

Los mineros/as, una vez más, nos marcan el camino. Con su valentía han despertado no sólo la simpatía sino también la rebeldía de millones de trabajadores/as amenazados/as. Con su solidaridad, perdemos el miedo, porque van a estar a nuestro lado. Con su orgullo, aprendemos apreciar lo que es de uno y nadie tiene derecho a arrebatarte. Con su humildad, recuerdan a quienes nos gobiernan y a quienes nos gobernaron, que nadie es más ni menos que nadie. Y ¿la unidad?, es imprescindible para ganar esta batalla, así que en vez de hablar o escribir de ella, ¡a practicarla!.