El acontecimiento político más
importante de los últimos años, histórico para algunos/as, ha sido el triunfo
por primera vez de una fuerza política nítidamente de izquierdas en el Gobierno
de un estado miembro de la Unión Europea, Grecia. Syriza, ha quedado a tan solo
dos escaños de la mayoría absoluta.

La
población ha querido cerrar la etapa de austeridad y demostrar que se puede y
se debe perder el miedo al chantaje de la Troika de acreedores (Banco Central
Europeo, Comisión Europea, Fondo Monetario Internacional), que imponen sus
condiciones para saldar deudas ilegitimas, injustas e impagables. Frente a la
amenaza, la mejor respuesta siempre es más democracia y más política. Se ha
apostado por priorizar a las personas frente a las entidades financieras y sus
negocios.
La
salida del Euro de Grecia no parece viable, y creo que sería un error puesto
que sería la constatación del fracaso de construcción del ideal europeo, y es
una medida que por sí sola no aporta nada. No obstante, si así lo decidieran
democráticamente los ciudadanos/as de un país, no deberíamos de permitir que
ninguna institución no democrática pudiera interferir la soberanía popular.

No
obstante, es importante comentar que no es buena señal que en el Gobierno del
Presidente Alexis Tsipras no participe ni una sola mujer. Se confundirían si
piensan que se pueden diseñar políticas para ganar en igualdad, sin tener en
cuenta la opinión, capacidad y decisión de la mitad de la población. La
transformación social o es feminista o no será.
jmzapico@asturias.ccoo.es